Somos un grupo de amiguetes que hace algún tiempo nos juntamos todas las semanas para compartir una buena cena, un buen vino y una buena conversación. Como dentro del grupo hay alguno que tiene "azogue" (¿a que si, Vania?) decidimos montar un blog donde poner las recetas de lo que vamos haciendo para las cenas rurales. Eso si, siempre con un sano cachondeo.
Estas son las famosas croquetas de la madre del Per. Sólo las ponemos para mostrarlas al gran público, pero claro, no vamos a poner la receta por que esto es como el secreto de la coca-cola, que no se puede divulgar.
9 comentarios:
Anónimo
dijo...
Por cierto, menuda putada perderme las famosísimas croquetas de la Amalia, mecagüen diez. En fin, otra vez será...
Todas las buenas recetas (y aquí sólo se publican buenas recetas) son variables. Hacer una comida o una cena para los colegas se convierte en un recital en el que basándote en una estructura creada (la receta per se) uno pone de su parte, interpreta, improvisa y le da su toque personal a esa receta. Por eso dependiendo de los ingredientes que uses (hay tomates y tomates, por ejemplo), de cómo se interpreten ese día las proporciones de la receta (nunca una pizca de sal es igual a otra pizca de sal), de los ingredientes que aportes o que sustituyas de la receta original y de tu estado de ánimo, así el resultada final es uno u otro, pero si se hace con ganas y pasión siempre será satisfactorio.
9 comentarios:
Por cierto, menuda putada perderme las famosísimas croquetas de la Amalia, mecagüen diez. En fin, otra vez será...
Pues tienen una pinta de chuparse los dedos, asique Per si no das la receta, por lo menos me tendras que invitar a una o dos eeeeeeeeeee.
sin deseo no hay placer, asi que empezar a desear!!!!!!
JA JE JI JO JU
Lo mejor de todo es que ni el per sabe la receta. Per!!!, recuerda a tu madre que incluya la receta en la herencia!!! Esto no se puede perder!!!!! ;)
hay cierta leyenda urbana que dice que la receta es variante, como el agua de un rio que jamas es la misma.
Todas las buenas recetas (y aquí sólo se publican buenas recetas) son variables. Hacer una comida o una cena para los colegas se convierte en un recital en el que basándote en una estructura creada (la receta per se) uno pone de su parte, interpreta, improvisa y le da su toque personal a esa receta. Por eso dependiendo de los ingredientes que uses (hay tomates y tomates, por ejemplo), de cómo se interpreten ese día las proporciones de la receta (nunca una pizca de sal es igual a otra pizca de sal), de los ingredientes que aportes o que sustituyas de la receta original y de tu estado de ánimo, así el resultada final es uno u otro, pero si se hace con ganas y pasión siempre será satisfactorio.
totalmente de acuerdo
viva la amalia!!!
rellenitooorrrrrrrrrr
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