sábado, 22 de septiembre de 2007

Pechugas dulces


Autor: Perfecto

  • Un filete de pechuga hermoso por barba
  • Dos cebollas
  • Dos botes pequeños de maíz
  • Un huevo por barba
  • Un vaso de leche
  • Aceite de Altos del Cabriel
  • Sal

Se ponen los filetes de pechuga en adobo con leche y sal. Se hace un sofrito de cebolla y maíz, para después esclafarle los huevos, y revolverlo todo. Se sacan las pechugas del adobo y se secan, para evitar las salpicaduras (según la Amalia). Se fríen las pechugas y se ponen en una fuente, echando después el revuelto encima. La sal se añade al gusto, en las pechugas o en el revuelto.




10 comentarios:

koem dijo...

bueno, bueno salieron un poco dulces y es que yo y la sal estamos un poco en guerra, pero la idea es brutal jejejeje.

Anónimo dijo...

Si, a mí me parece brutal también la idea! Y además, creo que estaban bien de sal! ;)

Anónimo dijo...

y tu que tienes en contra de la sal.las pechugas estaban de muerte tal y como las hiciste per enhora buena

koem dijo...

acias quillo, pero no descansare hasta llegar al nivel de tu super ajillo radiactivo.
LARGA VIDA AL AJO!!!!!!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

LARGA VIDA!!!!!!

Anónimo dijo...

Eso, larga vid al ajo!!!! Es bueno pa la circulación, sano del to, evita los ataques de los vampiros y aumenta la potencia sexual. Lástima que disminuya las posibilidades de usar esa potencia sexual con alguien más, pero nada que un buen cepillao de dientes y unos chicles no arreglen :-)

Anónimo dijo...

Y no te resfrías en tó el año!!

Anónimo dijo...

yo no opino lo mimo puesto que soy yo la victima jajajaja

Anónimo dijo...

yo no opino lo mimo puesto que soy yo la victima jajajaja

koem dijo...

monica creo que tienes un poco de eco.